En respuesta a las críticas que recibió durante su reunión, el gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, dijo que no era su responsabilidad orientar los mercados financieros sobre las tasas de interés. Muchos se sintieron descontentos con este comentario, especialmente porque en el verano él insinuó aumentos de tasas para noviembre. Pero ayer, el banco central mantuvo las tasas de interés en los mismos niveles y no realizó ningún cambio en el volumen de compras de bonos.

Muchos también anticiparon un aumento en los costos de los préstamos del 0,1% al 0,25%, razón por la cual los bancos comerciales como Barclays, NatWest y Lloyds Banking cerraron sus líneas hipotecarias más baratas antes de que se tomara una decisión. Esto afectó directamente a los préstamos a los hogares.

Mientras tanto, la inflación subió al 5%, que es el doble del objetivo del Banco de Inglaterra. Los bonos también se recuperaron y los rendimientos cayeron a su nivel más bajo desde Brexit. Bailey dijo que esta caída podría conducir a un aumento de las presiones inflacionarias. También señaló que sus comentarios anteriores sobre el inminente aumento de las tasas de interés fueron demasiado exagerados.

Todo esto hizo que la gente calificara a Bailey de "poco confiable", similar a lo que sucedió con el ex gobernador Mark Carney, cuando anunció un alza de tasas y luego cambió de opinión.

Mercado laboral de EE. UU.

A última hora de la tarde se publicará un informe sobre el empleo en Estados Unidos, donde muchos esperan ver un aumento de 450.000 trabajadores. Los dos informes anteriores han decepcionado a todos, ya que indicaron un descenso continuo. En consecuencia, los salarios se dispararon a niveles récord en el último trimestre, marcando la tasa más alta desde 1991. Si los salarios continúan aumentando, los costos de materiales y transporte aumentarán, lo que obligará a las empresas a subir los precios. Esto puede conducir a un círculo vicioso, especialmente porque la erosión inflacionaria del poder adquisitivo también estimula la demanda de salarios más altos.

El jefe de la Fed, Jerome Powell, también señaló que si los salarios continúan afectando significativamente la inflación, los empleadores se verán obligados a subir los precios. Además, si el crecimiento de los salarios no se ralentiza a pesar de la estabilización de la situación en el mercado laboral, la Fed tendrá que empezar a subir las tasas a partir de junio del próximo año.

En respuesta a esto, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, pidió a las empresas que realicen una vacunación más activa contra Covid-19. Las empresas con 100 empleados o más deberán vacunarse o realizar pruebas periódicas para detectar Covid-19. La fecha límite para la implementación de estos requisitos es el 4 de enero del próximo año. No hacerlo podría resultar en una multa de hasta $136.000.

Aunque esta medida podría proteger a más de 84 millones de trabajadores estadounidenses, los expertos dicen que puede tener un efecto secundario indeseable. Los trabajadores que se oponen a las vacunas pueden dejar sus trabajos, lo que será otro golpe para las empresas que luchan por encontrar empleados.

En la zona del euro, la actividad en el sector de servicios creció a un ritmo más lento en octubre. Los problemas de la cadena de suministro son el factor clave que arrastró el índice a 54,6 puntos. Tanto Alemania como Francia registraron descensos hasta el mínimo de nueve meses, mientras que España registró el crecimiento más lento en siete meses. Italia también registró una caída masiva.

Análisis técnico del EUR/USD

Mucho depende de 1,1560 porque una ruptura podría provocar una subida a 1,1590 y 1,1615. Mientras tanto, una caída por debajo del nivel resultará en una caída a 1,1530, y luego una caída adicional a las áreas de 1,1490 y 1,1450.