El director ejecutivo de Morgan Stanley, James Gorman, se ha pronunciado sobre la política monetaria de Estados Unidos. Esto sorprendió a muchos, ya que es muy raro que los gigantes de Wall Street hagan tales declaraciones.

Mientras tanto, Alemania publicó ayer estadísticas mixtas. El PIB cayó más de lo esperado por los economistas, mientras que el sector empresarial siguió mostrando tasas de crecimiento prometedoras.

En una entrevista, James Gorman dijo que espera que la Reserva Federal reduzca las compras de bonos para fines de este año y comience a subir las tasas de interés a principios de 2022. Esto es mucho más rápido de lo que proyectaron los economistas de Wall Street y puede causar bastante ruido en el mercado si se hace realidad.

"Personalmente creo que es probable que las tasas aumenten a principios del próximo año, en lugar de en 2023, lo que la Reserva Federal pronostica actualmente", dijo Gorman. "Pero, por supuesto, la Fed se guiará por lo que les digan sus números. Simplemente les estoy dando mi opinión", agregó.

La gran pregunta ahora es, si las presiones actuales sobre los precios son temporales o significan cambios más fundamentales en la economía. Pero la Fed está firme en que es el primer escenario y está tratando de convencer a los mercados de esto. Además, nadie duda de que la economía estadounidense mostrará una fuerte recuperación en los próximos meses, gracias al creciente gasto de los consumidores. Sin embargo, es bastante difícil predecir cómo afectará esto a la inflación.

Mientras tanto, en Europa, Alemania publicó ayer informes contradictorios. Destasis dijo que el PIB cayó un 1,8% este primer trimestre, lo que significa que en solo un año, la economía se contrajo un 3,4%. Los analistas inicialmente predijeron una disminución del 1,7%, pero la producción cayó hasta un 5,0% y el consumo privado se redujo un 5,4%.

Sorprendentemente, el sector empresarial siguió mostrando un crecimiento prometedor. El IFO dijo que la confianza empresarial subió a 99,2 puntos en mayo, que es la tasa más alta desde mayo de 2019. Los datos de la situación actual también crecieron a 95,7 puntos, mientras que la cifra de expectativas subió a 102,9 puntos.

Ambos datos no afectaron mucho al mercado, pero hoy todo depende de 1,2240, ya que una ruptura por encima de este dará como resultado un salto más grande hacia 1,2295 y 1,2350. Pero si la cotización cae por debajo de 1,2240, el euro caerá a 1,2200 y 1,2160.

GBP

La libra declinó ante la noticia de que los líderes de la UE rechazaron las demandas del Reino Unido de enmendar los términos del Brexit.

En una entrevista, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo que Europa no le dará otras alternativas al Reino Unido, por lo que este tiene que cumplir con el acuerdo Brexit.

El Reino Unido se quejó de que la UE está implementando reglas muy estrictas al verificar los bienes que se mueven desde el Reino Unido a Irlanda del Norte, por lo que quería hacer algunas enmiendas al acuerdo Brexit. Pero la respuesta de la UE significa que nada cambiará y que Irlanda del Norte seguirá atada al mercado único europeo.

"La relación con el Reino Unido debe seguir siendo mutuamente beneficiosa y bajo ninguna circunstancia debe socavar la integridad del mercado único, la Unión Aduanera o la autonomía de toma de decisiones de la UE", dijeron los líderes de la UE en una declaración conjunta el lunes.

En una nota diferente, la Oficina de Estadísticas Nacionales del Reino Unido informó que el déficit presupuestario continúa creciendo debido al gasto destinado a combatir el coronavirus. Por lo tanto, este mes de abril, el endeudamiento neto saltó a £31,7 mil millones, mientras que la deuda pública llegó a £2,17 billones, lo que es aproximadamente el 98,5% del PIB. Este es el récord más alto desde marzo de 1962.

Pero el Banco de Inglaterra aún no está preocupado por tales cifras, porque según el banco central, quiere que la economía se recupere primero de la pandemia de coronavirus. Y con los programas de vacunación en marcha, el Reino Unido debería estar en pleno funcionamiento para el verano, lo que compensará el enorme déficit presupuestario.

Con respecto a las compras de bonos, el gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, dijo que el banco central aún no tiene planes de reducir tales medidas, por lo que mantendrán el mismo volumen durante bastante tiempo.

Volviendo a la libra, todo depende hoy de 1,4200 porque una ruptura por encima de este desencadenará un salto más grande hacia 1,4255 y 1,4310. Mientras tanto, una caída por debajo de 1,4140 conducirá a una nueva caída hacia 1,4090, y luego a 1,4040.